El sábado 16 de febrero de 2013 abría sus puertas el renovado edificio de Les Drassanes Reials de Barcelona, sede del Museu Marítim, después de años de intervenciones. La última fase de actuación, la recientemente inaugurada, ha obligado a cerrar el museo durante tres años y trasladar sus piezas a almacenes externos para su correcta conservación.
Durante la realización de dichas obras se llevaron a cabo excavaciones arqueológicas que han dado como resultado importantes descubrimientos. En primer lugar, han permitido revisar la cronología del propio edificio, y en segundo lugar, descubrir una necrópolis romana.
Hasta hace no mucho se pensaba que el edificio que podemos ver en la actualidad era un edificio gótico cuyo origen se remontaba al siglo XIII. Sin embargo, gracias a las excavaciones arqueológicas, se ha podido descubrir que lo que vemos en la actualidad pertenece a una reforma integral del edificio del siglo XVI. Tal vez por cambios en la línea de costa o por daños causados por algún temporal, lo cierto es que el edificio tuvo que ser reconstruido y desplazado ligeramente de su emplazamiento original, desapareciendo así aquello que pertenecía a las fases anteriores de los siglos XIII y XIV. De este modo, lo que se puede ver en la actualidad pertenece a esta reforma del siglo XVI, no pudiéndose apreciar ni el edificio anterior ni tampoco las reformas posteriores que se hiceron cuando, a partir del siglo XVIII, el edifició sirvió a usos militares (cuartel de artillería, fábrica armamentísitca, etc).
…a finales de 2014 tiene previsto abrir el renovado Museu Marítim, un museo que se basará en la relación del hombre con el mar y que apoyará su discurso en tres conceptos: puerta, puente y puerto.
Por su parte, los descubrimientos de tumbas romanas datadas entre los siglos I y VI han permitido, no solo recuperar materiales de los ajuares y restos óseos, sino profundizar más en el conocimiento del trazado de las vías que pasaban por Barcino, pues las necrópolis romanas se disponían siempre en paralelo a las vías de acceso a las ciudades. Así, se ha podido conocer con más detalle cuál era el trazado de la vía que circundaba la ciudad por el litoral, lo que a su vez a permitido saber que en aquel momento la línea de costa estaba más hacia el mar de lo que se pensaba al principio.
Por otro lado, las recién inauguradas obras de restauración no solo han rehabilitado el edificio, sino que lo han adaptado a las nuevas necesidades del Museu Marítim de Barcelona, construyendo una sala de reserva con control de factores ambientales para una correcta conservación de los fondos, una nueva biblioteca, un nuevo Centro de Documentación Marítima y una aula didáctica. Y es que a finales de 2014 tiene previsto abrir el renovado Museu Marítim, un museo que se basará en la relación del hombre con el mar y que apoyará su discurso en tres conceptos: puerta, puente y puerto. El museo incluirá un centro de interpretación cuya museología se desarrollará a partir de las ideas de la boya y la red, la boya que llama la atención sobre temas de interés y la red que recoge los materiales didácticos. Además, serán accesibles espacios que hasta ahora permanecían cerrados al público.
Será muy interesante poder descubrir este nuevo proyecto museográfico, pero mientras tanto nos conformaremos con visitar Les Drassanes Reials para verlas como nunca más podremos verlas: vacías. Te animamos a que te acerques y disfrutes de este edificio único en toda su grandeza y su esplendor.
Luis M. García
25 febrero, 2013 |
El edificio se ve impresionante. Creo que lo han respetado bastante según he leido y también los restos arqueológicos.
En Sevilla también tenemos un edificios que tuvo la misma función, las Atarazanes Reales, para las que hubo un proyecto para convertirlas en Caixaforum, pero finalmente no llegó a buen puerto el proyecto y a día de hoy siguen cerradas y sin uso.