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British Museum, Londres. (*)

Desde comienzos del siglo XXI, una parte de los museos del Reino Unido ofrece la posibilidad de entrar en sus salas de forma gratuita. Haciendo gala de la elegancia anglosajona, se sugiere una donación voluntaria de 3 ó 5 Libras. El usuario puede depositar la cantidad que estime oportuno, pero en los carteles de entrada reza la siguiente máxima: No admission fees.

En un país donde las personas están acostumbradas a pagar por la televisión pública anualmente en forma de tasa, resulta curioso que los museos sean gratuitos y no digamos en una ciudad como, por ejemplo, Londres, que aparece en todos los rankings como una de las ciudades donde el nivel de vida es más elevado.

En época de austeridad económica y en un momento en el que, por cierto, las tasas universitarias se han triplicado en ese país, siguen sin cuadrar las cuentas con respecto a los museos. Quizás por este motivo, desde mediados de 2011 algunos medios de comunicación como el diario The Guardian han empezado a plantear la posibilidad de que exista una contraprestación económica al visitar cualquier museo del Reino Unido.

Aunque desde el siglo XVIII con el movimiento de la Ilustración se pretendió que las colecciones privadas fueran accesibles a un público más amplio (aunque todavía seguía siendo exclusivo) y durante el siglo XX, con el surgimiento de la sociedad de masas, se ha hecho tangible una realidad en la que la accesibilidad económica es prácticamente plena, se ha llegado a un punto en el que este modelo de financiación presenta evidentes problemas.

Un aspecto positivo de la crisis económica es que el conjunto de la población está adquiriendo unos conocimientos técnicos –a veces incluso elevados- sobre cómo funciona la economía y qué es el dinero. El dinero sirve para hacer una estimación del valor que tiene un producto o servicio. Por eso desde Croma Comisarios Culturales, queremos plantear las siguientes preguntas ¿Qué valor tiene para ti asistir al Museo Británico? Si tuvieras que poner un precio a tu visita, a lo que has podido contemplar, a lo que has podido aprender, ¿qué precio pondrías?

Nos gustaría abrir un amplio debate sobre este particular, pero desde una perspectiva que parta desde cero, sin prejuicios ideológicos. Aunque en España, los museos no son totalmente gratuitos, ¿consideras, por ejemplo, que un museo debe generar déficit por falta de financiación? Nos encantaría recibir opiniones, críticas constructivas y propuestas para tratar de vislumbrar cuál puede ser la fórmula de financiación para poder mantener los museos y que éstos puedan ser disfrutados por toda la población.

(*) Imagen de Portada: Mikule. Creative Commons License.