Hace un tiempo publiqué una entrada en este blog que versaba sobre las cinco razones más importantes que yo consideraba indispensables para estudiar Historia del Arte (si aún no lo has leído te recomiendo que lo hagas). Aquel post fue muy leído, comentado y compartido, por lo que me gustaría continuar esta saga proponiendo un nuevo tema de debate sobre las diez aptitudes que toda persona que desee estudiar Historia del Arte debería desarrollar.
He de decir que me baso exclusivamente en mi experiencia como estudiante (en realidad nadie es maestro, todos somos estudiantes) de esta disciplina y que, por tanto, seguramente otras personas tendrán un criterio diferente al mío. En ese caso, sería de gran ayuda que aportaran sus comentarios al final del texto para que así puedan beneficiarse los futuros lectores.
Sin más, paso a enumerar estas diez aptitudes:
1. Ser una persona sensible: sin duda alguna esta es la característica fundamental que debe poseer toda persona que de verdad quiera estudiar Historia del Arte. El estudio de la producción artística de la humanidad requiere de personas que dispongan de unos sentidos muy aguzados. La buena noticia es que no es imprescindible tener una predisposición genética (aunque si esto fuera posible, sería deseable), ya que los sentidos se pueden educar. Aún así, es muy importante, por encima de cualquier otro aspecto, saber observar y saber escuchar. Incluso yo añadiría: saber degustar (artículo relacionado: 3 consejos para degustar una obra de arte).
2. Apreciar los detalles y sutilezas: cuando estudias Historia del Arte, en realidad estás estudiando imágenes o sonidos. Por lo que respecta a las imágenes, me imagino lo que estarás pensando: ¿si contemplo una obra in situ de qué imágenes me hablas? Todo es imagen, ya provengan directamente de la realidad, de una proyección en una pantalla o de un libro. En el primero de los casos tendrás el privilegio de contemplar la obra de arte sin más filtro que el que te proporcionan tus ojos (artículo relacionado: la apariencia de normalidad) y en el resto de opciones, aumentarás el margen de error en relación a la lectura que realices sobre la obra de arte. Exactamente de esto es de lo que trata la Historia del Arte, de apreciar esos detalles y sutilezas que normalmente pasan desapercibidas para la mayoría de las personas y ponerlos al servicio de los demás: de hacer visible lo invisible.
Lo explicaré de otra manera porque este punto es muy importante: la mayoría de personas tienen una visión de conjunto. Si, por poner un ejemplo, se sientan a ver una pared blanca, sólo verán una pared blanca. Lo que ocurre es que los artistas verán en esa misma pared miles de detalles, verán las imperfecciones de la pintura, las texturas, los cambios de color a lo largo del día cuando los rayos de sol penetran a través del cristal de la ventana. Los artistas ven así el mundo y tú estudiarás a estos artistas.
3. Ser contemplativo: (artículo relacionado: el ser estético). La vida contemporánea es una vida de acción, de productividad, de inmediatez. El estudio de la Historia del Arte recuerda más a una ceremonia japonesa de té, es calmada, parsimoniosa, sin atajos rápidos, zen. Si eres una persona con taquicardia permanente, ya sabes que la desesperación será la tónica general cuando asistas a clase (o estudies por tu cuenta) pero si, por el contrario, eres una persona que se maravilla al ver florecer los cerezos, tiene el suficiente temple para ver una película de Terrence Malick, o de esuchar la pieza musical 4’33’’ de John Cage sin pestañear: esta es tu vocación.
4. Ser un buen lector/redactor: lo queramos o no, el buen uso del lenguaje es fundamental para estudiar Historia del Arte, ya nos gustaría aprehender la realidad de forma inmediata, pero no es posible, necesitamos del lenguaje para comunicarnos. Durante tus estudios tendrás que leer y escribir mucho (muchísimo), así que si estás acostumbrado a hacerlo y has adquirido con los años el hábito de la lectura y la escritura, serás un estudiante muy aventajado. Todo es cuestión de ponerse a la tarea y leer un poco cada día y escribir a menudo sobre los temas que te resultan de interés, ya sea en un blog o en un cuaderno de notas. Mi consejo es que lo hagas públicamente, ya que así seguro que te esfuerzas más y otras personas pueden beneficiarse de tus logros y tus avances en la materia.
5. Tener buena memoria: miles de pinturas, miles de esculturas, miles de películas, miles de canciones, miles de libros, etc. Esto es lo que te espera si decides estudiar Historia del Arte, pero no te asustes, esto ya lo haces cuando vas de viaje o en tu tiempo de ocio. La única diferencia es que ahora deberás memorizar (o recordar, si quieres usar un término que intimide menos) al menos las más importantes obras de cada artista o periodo. Aquellas que son el paradigma que explica una época o aquellas que ejemplifican un cambio en los gustos estéticos del momento.
6. Tener capacidad de interrelación: unido con el punto anterior, podemos decir que la buena memoria no sirve de nada si no sabemos conectar esas imágenes o piezas sonoras entre sí. Una buena obra de arte siempre establece un diálogo con el pasado, está cargada de referencias, de guiños ingeniosos. Es lo que en literatura se conoce con el término de “intertextualidad” y básicamente se refiere a que cada obra está influenciada por sus predecesoras, ya sea implícita o explícitamente. A eso me refiero con que debes tener una gran capacidad de relacionar estas obras de arte, para que puedas comprender las evoluciones, involuciones y revoluciones que se han producido a lo largo de la Historia del Arte.
7. Tener capacidad de abstracción: El estudio de obras concretas no conduce a ninguna parte, ya lo hemos adelantado en el párrafo anterior. Ahora bien, relacionar estas obras entre sí tampoco servirá de nada si no somos capaces de extraer unas conclusiones generales. De eso es de lo que trata la capacidad de abstracción, tan necesaria en estos menesteres. La capacidad de abstracción es imprescindible para enunciar teorías que expliquen cuál ha sido el rumbo que ha seguido la humanidad. No olvidemos que al fin y al cabo trabajamos con fragmentos de la realidad y que recomponer el puzle será la tarea a la que se enfrentarán posteriormente los historiadores del arte. Sin la capacidad de abstracción nos quedaremos en ese análisis de los fragmentos del pasado y eso, no deja de ser anecdótico.
8. Tener capacidad de reflexión: la reflexión es diferente a la capacidad de abstracción. Están íntimamente unidas, pero no son lo mismo. La reflexión es un proceso en el que se barajan diferentes hipótesis obtenidas del estudio de diversas variables; consiste sobre todo en dilucidar cuál pudo haber sido la verdad, que es el valor máximo al que siempre debemos aspirar. Es un proceso difícil y aunque es individual, debe someterse al escrutinio de los colegas de profesión que, a través de la crítica constructiva, deberán validar o no los resultados de una investigación. Reflexión, reflexión, reflexión. Ya llegará el momento de poner por escrito las conclusiones de tus pesquisas.
9. Tener capacidad de análisis: Analizar es separar y dividir en partes. Una imagen, aunque está acotada, es un universo en sí mismo. Tiene un significado y ha sido realizada con una intención muy concreta. Desentrañarlo será tu tarea y te llevará tiempo porque todos los elementos que componen una obra son susceptibles de ser analizados: materia, color, técnica, fecha de producción, material, composición, dibujo, iconografía, etc. Además es necesario también conocer el contexto en el que se produjo la obra, la biografía del autor y el lugar en el que se encuentra o se expone la obra.
10. Saber apreciar la belleza: (artículos relacionados: la tiranía de la belleza, la recuperación de la belleza). Decía el célebre psicólogo humanista Abraham Maslow que en la cúspide de la pirámide de las necesidades humanas se encontraba la autorrealización y que todo ser humano para ser feliz en última instancia y tras disponer de todas sus necesidades cubiertas ansiaría, entre otras cosas, la búsqueda de la belleza. Estoy de acuerdo, los seres más refinados buscan la belleza, lo que pasa es que a veces esto se confunde con la cursilería. Nada que ver. La belleza no es solo la proporción, simetría, ritmo y armonía de las esculturas clásicas. Esa idea de belleza, aunque totalmente válida (yo la suscribo por completo) es sólo una parte de la belleza total. Te toca a ti descubrir la otra clase de belleza, ese camino debes recorrerlo tú solo.
Un último requisito
11. Tener una mente abierta: como último requisito quiero mencionar, al menos de forma somera, lo importante que es tener una mentalidad abierta cuando se estudia Historia del Arte. Sorprendentemente la mayoría de las personas son bastante conservadoras en cuanto a sus gustos estéticos, incluso los estudiantes de arte lo son. Es cierto que vivimos en la era de los excesos y los artistas tienden a jugar con los límites del arte (ejemplos de esto hay miles, desde Duchamp a Manzoni o Damien Hirst), pero aún así debemos tener la suficiente grandeza para reconocer el valor de la transgresión si se hace para cambiar paradigmas caducos. Yo no soy partidario de la transgresión vacua, eso suena más a pornografía. La otra, la novedosa, es la que no todos saben entender de entrada, la que luego combaten ferozmente y la que finalmente aceptan como normal. No seas uno de ellos, ten una mente abierta.
Pues bien, espero que te haya servido de ayuda este listado de aptitudes (finalmente once en total) que considero importantes que desarrolles. Aquí la clave es desarrollar, ya que si has leído hasta aquí, estoy convencido de que tú todo esto ya lo llevas incorporado en tu ADN, ahora solo queda empezar o, mejor dicho, continuar porque, de hecho, YA has comenzado.
Actualización: lanzamos un nuevo libro
¿Estás pensando estudiar Historia del Arte y no sabes si es lo correcto? ¿Ya estás haciendo la carrera y estás estancado? ¿Has terminado tus estudios y no sabes cómo insertarte en el mercado laboral? Entonces este libro está pensado para ti.
En este libro encontrarás las claves prácticas para saber:
- Si deberías (o no) estudiar la carrera de Historia del Arte.
- Cuánto cobra un licenciado o graduado en Historia del Arte.
- Dónde estudiar la carrera y cómo elegir las asignaturas correctamente.
- Cuáles son las salidas laborales con todo lujo de detalles (incluso aquellas que no te imaginas y que son muy rentables).
- Cómo aprovechar al máximo la carrera y cómo terminarla con éxito.
- Cómo y dónde seguir formándote después de terminar la carrera.
- Cómo afrontar el doctorado y la tesis.
- Cómo prepararte unas oposiciones.
- Cómo aumentar las posibilidades de encontrar trabajo.
- Cómo buscar y encontrar trabajo relacionado con la carrera en el extranjero.
- Cómo montar tu propia asociación o empresa cultural.
- Cuáles son las becas o ayudas a las que puedes optar.
Y más información valiosa que normalmente nadie te cuenta.
El mundo necesita muchos historiadores del arte, necesita de personas sensibles que amen el arte y la belleza. Te necesitamos.
Puedes echarle un vistazo al libro en este link.
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(*) Imágenes: Wikimedia Commons, SFMoma, Lux & Jourik, Matthew Medoza, C. G. P. Grey’s Photography. Creative Commons and Fair Use License.
Elena
25 enero, 2015 |
Estoy muy de acuerdo con tu artículo ya que como quasi historiadora del arte a falta ade un cuatrimestre, pienso que todo aquel que se interese por esta disciplina, al finalizar sus estudios debe haber conseguido la interdisciplinariedad que todo buen historiador del arte debe de tener y sobre todo ser contemporáneo ya que el arte no es estático, sino que al contrario está en continuo movimiento.
Un saludo y felicitaciones por todos los artículos que estas escribiendo. Elena.
Javier Albelo
25 enero, 2015 |
Hola Elena, gracias por comentar. Te agradezco mucho el cumplido.
Está claro que la carrera de Historia del Arte te proporciona unos conocimientos muy completos y, sobre todo, te da una visión general que difícilmente te proporcionan otras disciplinas.
Sin embargo, en mi opinión, la habilidad fundamental que te ayuda a desarrollar es la de educar la mirada y eso, en un mundo como el actual, no tiene precio.
May López
8 mayo, 2015 |
Cuando se empieza una andadura como esta se agradece enormemente la lectura de estas entradas. Gracias
Javier Albelo
8 mayo, 2015 |
Hola May, muchísimas gracias a ti por leernos. Me alegro de que te haya servido. Un saludo.
Damaris Herrera Salazar
7 julio, 2015 |
Hola Javier! gracias por compartir tu experiencia! 🙂 quisiera saber donde estudiaste Historia del Arte y/o qué universidades recomendarías para estudiarlo?.
Saludoss desde Lima!
Javier Albelo
7 julio, 2015 |
Hola Damaris! De nada. Si puede servir de algo a otras personas yo estoy encantado de compartirlo.
Yo estudié en la Universidad de La Laguna en Tenerife y en la Universidad Complutense de Madrid, ambas en España.
Más que decirte una universidad concreta para estudiar, yo buscaría primero en qué te quieres especializar si en arquitectura, música, cine, artes plásticas, fotografía, etc., e intentaría mirar cuáles son las universidades que más asignaturas ofertan sobre esos temas. En mi caso, como quería especializarme en museos hice un máster en la Universidad Complutense porque es lo que iba buscando.
En el caso de que quisieras estudiar en una universidad fuera de tu país podrías quizás plantearte hacerlo en la UNED, que aquí en España tiene una excelente reputación, pero depende de tus gustos.
Saludos y espero que te haya servido.
Priscila del Aguila
2 agosto, 2015 |
En Lima puedes estudiar en San Marcos
Karen
11 noviembre, 2015 |
Hola Javier, estoy muy interesada en estudiar Historia del Arte me gustaría me pudieras recomendar alguna universidad en la cual pueda estudiar y antes de estudiar quiero empezarme a empapar en el tema, me recomiendas algún libro para empezar??
gracias y saludos!!
Javier Albelo
12 noviembre, 2015 |
Hola Karen, yo estudié en España así que no te podría recomendar universidades fuera de este país. Pero antes de elegir universidad sería mejor que te leyeras un libro: La Historia del Arte de E. Gombrich, te dejo el enlace por si le quieres echar un vistazo http://amzn.to/1MLKSLI
Ese libro es fantástico y muy sencillo de leer. Si lo lees vas a tener una visión de conjunto de toda la Historia del Arte. Una vez que tengas esa panorámica general, yo intentaría ver qué temáticas te interesan más y en función de eso miraría qué universidades están especializadas en lo que a ti te gusta. Por ejemplo, imagínate que descubres que lo más que te gusta es el periodo del Renacimiento, pues entonces miraría qué universidades están especializadas en ese periodo o quiénes son los especialistas más destacados y dónde imparten clase.
Espero haberte ayudado, si quieres una vez que te hayas leído el libro (ese o cualquier otro que tú quieras), nos escribes y nos cuentas en qué estás interesada y ya vemos qué universidades se ajustan mejor a tus gustos.
¡Saludos y muchas gracias por escribirnos!
Karen
17 noviembre, 2015 |
No, mil gracias a ti, me es de mucha ayuda tu respuesta y claro que leere ese libro
mil gracias! te estaré escribiendo pronto!
saludos!!!
Mai Mai
19 noviembre, 2015 |
Hola Javier , acá desde argentina te saludo 🙂
Me interesa mucho la historia del arte , me gustaría trabajar en museos como guía.
Me pregunto si estudiando historia del arte podré acceder a este trabajo o es otra la carrera q tengo q estudiar ?
Hay algún mail a donde pueda conectarte ?
Gracias !
Javier Albelo
24 noviembre, 2015 |
Hola Mai Mai,
Gracias por escribirnos. No sé cómo funciona en Argentina, pero en principio deberías poder ejercer como guía. Es posible que también puedas acceder estudiando la carrera de turismo, pero no estoy seguro. Si es específico de museos, quizás sea mejor estudiar Historia del Arte. En el caso de España es bastante complejo porque depende de cada comunidad autónoma y habría que revisar la caótica legislación por si es necesario aprobar unas oposiciones. Por ejemplo, en Andalucía, tengo entendido que con la carrera de Historia del Arte y sabiendo dos idiomas (uno con nivel B1 y otro con nivel B2) podrías ejercer como guía, pero la situación puede variar considerablemente dependiendo del país.
Si quieres ponerte en contacto con nosotros escríbenos a cromacultura@gmail.com
¡Saludos!
Laura
18 diciembre, 2015 |
Hola Javier, quería hacerte unas preguntas.
Soy una alumna de primero de bachillerato y estoy perdidísima con todo esto de las carreras y sus salidas. Me decanté por el bachillerato social ya que tiene bastantes salidas respecto a ciencias económicas, etc, pero me he dado cuenta de que no es lo mío. Creo que me gustaría hacer historia del arte y llegar a ser guía fuera de España, aunque sé que es mejor estudiar turismo. Nunca se me ha dado bien hacer disertaciones o comentar textos jajaja. ¿Me recomendarias hacerla? ¿Qué salidas tiene?
¡Muchas gracias!
Javier Albelo
18 diciembre, 2015 |
Hola Laura,
Encantado de intentar ayudarte. Si tu pasión es la Historia del Arte lo ideal sería que la estudiaras porque supongo que no quieres tirar tu vida por la borda haciendo algo que no te gusta (al menos yo pienso así).
Pero, es muy importante que sepas que las salidas laborales de Historia del Arte no son demasiado amplias y que cuesta bastante insertarse en el mercado laboral.
Aquí tienes algunas salidas laborales: docencia, museos, instituciones culturales, galerías de arte, casas de subastas, como guía turístico, mediador cultural, escritor para revistas especializadas, conferenciante….
De todas formas, dentro de muy poco tiempo vamos a sacar una guía muy completa sobre todas las salidas laborales, cómo insertarte en el mercado laboral, cómo trabajar en el extranjero, etc. Y lo vamos a sacar a un precio absolutamente ridículo que simplemente nos permita cubrir los gastos de edición, diseño, etc.
Además, la semana que viene voy a publicar un artículo sobre cómo trabajar en el extranjero, ya que actualmente estoy trabajando en un centro cultural en Malta y voy a contar mi experiencia personal. Por eso, te recomiendo que te suscribas, para que no te pierdas esa información y porque todos nuestros suscriptores van a ser los primeros en poder disfrutar del libro que ya va a salir a la luz,
Haz click en este enlace si no estás suscrita: http://bit.ly/1sszKd4
Espero haberte ayudado aunque sea un poco, si necesitas más información puedes ir a la sección de recursos del blog y ahí vas a encontrar varios artículos sobre el tema que te recomiendo que te leas. Y si todavía quieres más información puedes preguntarnos lo que quieras e intentaremos solucionarte tus dudas.
¡Saludos! 🙂
vic
21 enero, 2016 |
Hola soy estudiante de Historia del Arte en la Universidad de Valencia, y estoy cursando 2.¿ Me recomendarías estudiar historia del arte e historia a la vez¿?
Javier Albelo
21 enero, 2016 |
Hola Vic,
Gracias por escribir un comentario. En cuanto a tu pregunta, yo personalmente no lo haría, preferiría centrarme en una sola carrera, ya que tampoco te aportará demasiado cuando termines y al final ya se sabe… el que mucho abarca poco aprieta.
En cualquier caso, no conozco cuáles son tus objetivos y, desde luego, si tú te ves con fuerzas para afrontar dos carreras a la vez, pues adelante.
Laura
19 febrero, 2016 |
¡Hola Javier!
Me gustaría compartir un hecho que te parecerá una locura, pero me llena, he encontrado lo que me faltaba y creo que he hecho bien.
El caso es que yo siempre, desde pequeñita, sabía que lo que más me gustaba era viajar y aprender sobre el arte de la zona. Todo empezó por mi amor a la mitología griega, y que con 8 años me impactó muchísimo Roma, me enamoré de la Piedad, de Miguel Ángel en particular.
El caso es que llegó el momento de escoger qué hacer, voy a 1º de carrera, evidentemente yo me conozco pero todos sabemos lo complicado que está ahora el mercado laboral y más si me decantara por historia del arte…
Bien pues, me matriculé en un doble grado (Derecho+ criminología (5años)), estudios que también me interesan mucho, pero me quedó la espinilla en el corazón de mi verdadera pasión, el arte. Siempre decía «algún día la haré en el futuro aunque sea a los 50, antes de morir la haré…». No pude esperar más. Se me ha ocurrido matricularme en la UNED e ir haciendo asignaturas poco a poco, sin matricularme de todas, acabo de realizar la matrícula para este semestre. Pensé que me apretarían más en el doble grado, estoy acostumbrada a un ritmo de trabajo superior al de este primer año de carrera y no me importa estudiar mucho más, es como ocio, leo lo que me encanta. Además llamé a la UNED y les comenté que en 3º iría con el agua al cuello porque empieza Derecho fuerte, me dijeron que si no me matriculaba en X años igualmente me guardaban las asignatruas aprobadas, aunque pasaran 10 años.
¿Qué te parece lo que acabo de hacer? Es que tus posts me han ayudado a decidirme, me veo tan reflejada…
Gracias por tu atención, Saludos
Javier Albelo
19 febrero, 2016 |
Hola Laura!
Me alegro mucho de que te hayas decidido a estudiar Historia del Arte. Si tu intuición te decía que lo hicieras seguro que es lo correcto, estas cosas mejor no racionalizarlas demasiado. Está muy bien lo que has hecho de continuar con tus estudios de Derecho, porque la carrera de Historia del Arte per se no va a ser suficiente para encontrar un trabajo, ya que la situación es bastante compleja. Se puede, pero lleva tiempo.
Por lo demás, un placer y un honor que mis artículos te hayan servido. Si he conseguido que te intereses por esta bella profesión, me siento totalmente reconfortado. Mi misión personal es fomentar el estudio de la Historia del Arte, así que objetivo cumplido 🙂
Saludos y muchas gracias a ti por leernos.
Mercedes Rodríguez
20 febrero, 2016 |
Hola Javier,
Estoy muy de acuerdo con tu artículo. Hay algo que echo en falta, aunque está en el fondo de lo que dices. Me refiero al sentido crítico y la capacidad de dudar de todo por muy «eminente» que sea el experto que lo haya escrito. No sólo algunas cartelas de los museos dan que pensar.
Gracias
Javier Albelo
21 febrero, 2016 |
Hola Mercedes,
Gracias por comentar. Muy cierto, la capacidad crítica es fundamental para estudiar Historia del Arte y para desarrollar la profesión. Obviamente no podemos dar por cierto todo lo que leemos y siempre tiene que estar, por así decirlo, bajo sospecha. Todo dependerá del prestigio de la persona que lo ha escrito, del perfil investigador, etc. Eso sí, siempre que vayamos a criticar algo debemos hacerlo siempre desde la crítica constructiva, de tal forma que nuestras aportaciones sean positivas y mejoren lo que otros han escrito.
Saludos y muchas gracias por apuntar esta nueva aptitud que, desde luego, es ciertamente esencial.